Reparación de cilindros hidráulicos
¿Alguna vez has cambiado las juntas a un cilindro y ha vuelto a fugar a los pocos días? Si reparas cilindros habitualmente, habrás descubierto que no es tan sencillo como parece. Nosotros lo sabemos porque llevamos más de 35 años haciéndolo. Hemos aprendido… y mucho. Y seguimos haciéndolo y mejorando nuestros procesos para darte el mejor servicio.
- Más de 35 años de experiencia
- Todos los sectores: Siderurgia, eólico, obras públicas, papeleras,…
- Más de 7.000 cilindros reparados
- Reparaciones 100% probadas
- Reparaciones con Garantía
Lo primero que hacemos es identificarlo, fotografiarlo y tomar medidas. Así, si lo desmontamos tenemos la información adecuada para devolvértelo tal y como nos lo enviaste, sin que tengas sorpresas al volver a montarlo en máquina.
Siempre realizamos una prueba inicial, para cuantificar la avería y detectar posibles daños adicionales que pudieran quedar ocultos.
Lo limpiamos y lo desmontamos, identificamos las juntas, revisamos las piezas y medimos las tolerancias.
Si tenemos dudas, comprobamos el estado de las soldaduras.
Ahora sí, con toda esta información ya podemos elaborar un presupuesto de reparación.
Si el vástago está dañado, intentaremos repararlo rectificándolo y aplicando una capa posterior de cromo para recuperar el diámetro inicial. Un rectificado posterior dará el acabado final para que quede como nuevo. Si los daños son muy profundos, te ofertaremos fabricar uno nuevo
También reparamos los posibles daños en la camisa mediante un lapeado, si las holguras resultantes y el sistema de estanqueidad lo permiten. Si no es posible, te ofertamos fabricar una camisa nueva.
¿Es necesario mecanizar alguna pieza del cilindro? Sin problema, por muy compleja que sea.
¿Fugas en las soldaduras? Las reparamos si es necesario. Con total garantía.
Sustituimos las juntas dañadas por referencias de máxima calidad, no nos la jugamos. Si el plazo es largo y no puedes esperar, tenemos solución, se pueden fabricar a medida.
Montamos todo con mucho cuidado y le realizamos una prueba final de funcionamiento. Así descartamos posibles fallos de montaje y comprobamos que queda perfecto.
Por último, un tratamiento de pintura y está listo para volver a producir. Lo identificamos con nuestra orden de reparación para que tengas trazabilidad. Además, registramos toda la información para que la siguiente reparación sea aún más ágil.
Por cierto, si a lo largo el proceso detectamos que algo es mejorable, te lo diremos. Tu decides.
Y si lo solicitas, te enviamos un informe con fotografías y los trabajos realizados. Así puedes documentar tus procesos de mantenimiento.
Puede contactar con nosotros para solicitar cualquier tipo de información. Sea lo más detallado posible, indicando toda la información relevante que ya tiene, incluidos los contactos, para ayudarnos a comprender su consulta y ayudarnos a encontrar la persona adecuada para manejar su solicitud.